Entrevista a Jorge Martín, secretario internacional de la campaña Manos Fuera de Venezuela

"El propio presidente Chávez ha hablado de los ejes estratégicos de la revolución después del 3 de diciembre, y entre ellos ha mencionado la necesidad de construir una economía socialista y de luchar contra la burocracia"

"Si bien es cierto que ahora mismo el imperialismo americano no puede lanzar una invasión militar contra Venezuela, mientras están empantanados en una guerra que no pueden ganar en Iraq, no es menos cierto que tienen otras armas en su arsenal contra la revolución"

Manos Fuera de Venezuela.- Recientemente se ha celebrado la segunda conferencia de MFV en Gran Bretaña, ¿qué valoración haces?

Jorge Martín.- La conferencia de MFV fue realmente un éxito, con la participación de más de 200 delegados, entre jóvenes activistas, representantes de sindicatos, activistas de solidaridad de otras campañas, etc. Se demostró el enorme interés que existe por conocer más acerca de la revolución bolivariana en Venezuela y también la disposición a organizar la solidaridad, particularmente ante las elecciones presidenciales del 3 de diciembre.La conferencia pasó una resolución haciendo un llamamiento a redoblar la solidaridad con Venezuela ante las inevitables amenazas y desestabilización que son las tácticas del imperialismo y la oligarquía ya que unas elecciones democráticas en este momento no las pueden ganar.

JM.- La solidaridad con la revolución venezolana ha dado importantes pases adelante. El año pasado el Congreso Sindical Británico (TUC) se convirtió en la primera confederación sindical europea en pasar una moción de solidaridad con Venezuela y en establecer relaciones con la UNT, rompiendo así con décadas de relaciones con la burocracia corrupta de la CTV. Esto fue posible por el trabajo de activistas de MFV en los sindicatos durante varios años, pero particularmente en el sindicato de periodistas y en el de profesores de universidad e instituto.El TUC representa a 6,7 millones de trabajadores afiliados a sindicatos. Este año hemos intervenido en todos los congresos sindicales y hemos conseguido afiliaciones a la campaña de sindicatos que representan a 800,000 trabajadores, y mociones de solidaridad con Venezuela en sindicatos que representan a otros 1,5 millones de afiliados. Ahora la tarea es llevar la campaña hasta la última sección sindical.

En nuestra experiencia, la revolución Bolivariana, y particularmente las iniciativas de control obrero y la discusión sobre el socialismo, tienen el efecto de entusiasmar a los activistas sindicales británicos que siguen sufriendo políticas de privatización, recortes a los gastos sociales, y a los que durante muchos años se les ha machado con la idea de que no hay alternativa. Venezuela demuestra que esto no es cierto, y que la lucha por un mundo mejor es posible y necesaria.

JM.- La campaña se inició con un llamamiento que hicimos cuando el paro-sabotaje petrolero de diciembre del 2002. Desde aquél entonces hemos avanzado mucho, tanto en el terreno sindical como entre los activistas juveniles. La revolución venezolana es ahora mucho más conocida y la campaña está activa en más de 30 países. Pero quizás la actividad más destacada fue el impresionante evento con el presidente Hugo Chavez que organizamos en Austria en abril, con la participación de 5,000 jóvenes. Tuvimos que vencer todo tipo de resistencia y sabotaje, pero al final se demostró que el mensaje de la revolución venezolana, que la alternativa a la que se enfrenta la humanidad es "socialismo o barbarie" conecta con la juventud europea. Para nosotros el auténtico internacionalismo, la mejor solidaridad que podemos ofrecer a la revolución bolivariana, es también discutir las ideas que allí se están discutiendo, aprender de esos debates, y preparar las condiciones para la lucha por el socialismo en nuestros propios países.

JM.- Desde un principio hemos tratado de hacer llegar la información de todas nuestras actividades a los activistas revolucionarios en Venezuela, que nos han insistido una y otra vez en la importancia que para ellos tiene saber que cuentan con el apoyo internacional, que se está rompiendo con el aislamiento y el cerco mediático. La campaña ha sido felicitada por el propio presidente Chávez en varias ocasiones, y también por Adán Chávez hasta hace poco embajador en Cuba, por William Izarra, veterano de los alzamientos militares de los 90 y hasta hace poco viceministro de relaciones internacionales, por Rodrigo Chávez antiguo coordinador de los Círculos Bolivarianos y ahora viceministro para Europa, y dirigentes sindicales y del movimiento revolucionario en general.Pero ahora por primera vez un grupo de camaradas en Venezuela están impulsando la creación de la Campaña Manos Fuera de Venezuela allá, con la idea de vincular el movimiento revolucionario a la solidaridad internacional de una manera más fluida.

Efectivamente, Alan Woods, que fue el fundador de la campaña MFV ha sido invitado oficialmente por la Feria Internacional del Libro de Caracas, dónde se van a presentar dos de sus libros en edición venezolana, y también va a hablar en un evento del Frente de Fuerzas Socialistas (la izquierda bolivariana en Mérida) al que se espera que asistan unas 800 personas, sobre la lucha por el socialismo y el debate del partido unificado de la revolución. Esto además demuestra que la revolución Bolivariana (que como todas, tiene sus propias particularidades) está y ha estado siempre abierta a las ideas revolucionarias vengan de dónde vengan.

JM.- Claramente, las elecciones presidenciales de diciembre no son unas elecciones normales, sino que marcan un punto de inflexión para la revolución. Así lo entiende la oligarquía y el imperialismo que están preparando todo tipo de actividades para desestabilizar al gobierno y deslegitimar las elecciones.

Pero las elecciones también son importantes para el movimiento revolucionario. El propio presidente Chávez ha hablado de los ejes estratégicos de la revolución después del 3 de diciembre, y entre ellos ha mencionado la necesidad de construir una economía socialista y de luchar contra la burocracia. Esto realmente va al fondo de la cuestión. La revolución bolivariana ha heredado un aparato del estado de la IV República, un estado que fue creado y desarrollado para defender los intereses de la oligarquía.

Hasta el momento se han tomado una serie de medidas para resolver el problema de este aparato que no hace más que sabotear todas las iniciativas revolucionarias del pueblo y el presidente. Pero ese aparato, en gran medida, sigue intacto. Es necesario reemplazarlo por una nueva institucionalidad revolucionaria que responda a los intereses de los trabajadores y las masas oprimidas.

JM.- Venezuela sigue teniendo una economía básicamente capitalista, en que palancas fundamentales de la misma están en manos de grupos monopólicos y multinacionales que han participado directamente en los intentos de golpe de estado contra el gobierno democrático y que siguen saboteando la economía. Por poner sólo dos ejemplos, el 80% de la banca está en manos de dos grupos españoles (BBVA y SCH) y la distribución de alimentos en manos de dos grupos monopólicos venezolanos, que pertenecen a destacados dirigentes golpistas. Esta situación no se puede mantener indefinidamente. Las palancas fundamentales de la economía deben de pasar a ser gestionadas democráticamente por los trabajadores y las comunidades, como parte de un plan económico nacional al servicio de los intereses del pueblo trabajador y no de una minoría privilegiada. Todas estas cuestiones se van a plantear de manera muy aguda después de las elecciones, y de su resolución depende el futuro de la revolución misma.

JM.- El imperialismo y la oligarquía saben que no pueden "salir de Chavez" por medios democráticos y parlamentarios por ahora. Todas las encuestas de opinión le dan a Chávez un 60% de los votos. Una demostración del carácter anti-democrático de la oposición es su candidato: Manuel Rosales, que firmó el acta del golpe de Carmona el 12 de abril del 2002.Su objetivo es deslegitimar las elecciones, con acusaciones espurias de falta de transparencia, irregularidades, etc. Es posible que se retiren en el último minuto (como hicieron en las elecciones general de diciembre del 2005) o que llegue el día de las elecciones habiendo creado una matriz de opinión de que los resultados van a ser muy ajustados y que Rosales puede ganar, y que entonces salgan a las calles a crear una situación de caos y violencia alegando que ha habido fraude.

Lo que sí está claro es que el imperialismo se toma estas elecciones muy en serio. La última medida que han tomado ha sido la de crear una nueva National Intelligence Agency para coordinar todo el trabajo de sus servicios secretos, y han puesto a John Negroponte al frente, alguien que organizó la guerra sucia en Centro América en los 80 desde su puesto en la embajada de Honduras. El que en aquél entonces era el secretario político de la embajada en El Salvador, William Brownfield, es ahora embajador en Caracas.

La CIA acaba de incluir a Venezuela en su "oficina de Cuba". Si vemos los métodos terroristas y criminales que han usado contra Cuba en los últimos 50 años, nos podemos hacer una idea de lo que preparan contra Venezuela.

Si bien es cierto que ahora mismo el imperialismo americano no puede lanzar una invasión militar contra Venezuela, mientras están empantanados en una guerra que no pueden ganar en Iraq, no es menos cierto que tienen otras armas en su arsenal contra la revolución.

Por eso hoy más que nunca es necesario redoblar el esfuerzo y la vigilancia de la solidaridad internacional, y gritar más fuerte que nunca Manos Fuera de Venezuela.