APLASTANTE VICTORIA ELECTORAL

Tras la aplastante victoria electoral del proyecto revolucionario del presidente Chávez en las elecciones celebradas ayer, 3 de diciembre de 2006, desde el Estado español nos unimos a la celebración de esta histórica victoria. Las masas en Venezuela han vuelto a poner su sello en los acontecimientos cogiendo con las dos manos el llamamiento a las urnas como una nueva herramienta para defender la revolución y avanzar hacia el socialismo. Esta victoria es, además, un nuevo golpe al imperialismo internacional y a sus lacayos oligarcas en Venezuela.

Pero hoy, los jóvenes, los trabajadores y los revolucionarios del Estado español también estamos de celebración. Este nuevo paso, que consolida el proceso revolucionario en Venezuela, es también un paso contundente en la lucha por un mundo mejor basado en las ideas del socialismo.

Todos los intentos del imperialismo de atacar la revolución venezolana y, en las últimas semanas, desestabilizar el proceso electoral han quedado aplastados por la movilización de las masas en defensa del proyecto revolucionario. Incluso no les ha quedado más remedio que reconocer la validez democrática de las elecciones, pese a todas las calumnias que habían vertido en los últimos días. Aún así, el imperialismo y los guardianes del capitalismo a escala mundial no descansan en sus planes. La revolución tampoco debe hacerlo. La mejor forma de salvaguardar estos resultados electorales y todas las conquistas de la revolución y del pueblo venezolano es avanzar, de forma decidida, hacia la ruptura con el sistema que durante décadas ha condenado a la mayoría de los venezolanos a la miseria y la exclusión. Como el presidente Chávez transmitió en su primer discurso ayer, tras conocerse los resultados electorales, es fundamental luchar contra la "contrarrevolución burocrática" y contra la "corrupción" dentro del estado. Estas tareas son fundamentales y el gobierno revolucionario, la clase obrera y el pueblo venezolano deben llevarlas a cabo, juntos y unidos, en el camino definitivo hacia el socialismo.